Oh, poderoso San Cipriano y amada Justina, fiel del santo en su misión divina, les ruego me concedan la protección contra todo mal que necesito para vivir en paz.
Sin males que acechen, amado San Cipriano, que todo lo concedes a tus fieles. Bendito seas siempre, Señor y santo venerado, en ti confío, dame tu favor y escucha esta súplica desesperada para que en mi ser no entre el mal de hechizos negros, envidias y enemigos…
Dame la Gracia divina, en tu ser confío, ahora y siempre, San Cipriano bendito! Protégeme por Siempre.
AmenSi necesitas una bendición para tu vida, las oraciones a San Cipriano colmarán tus deseos, ya sea en el ámbito amoroso, de salud, laboral o económico.
Estas plegarias van a mejorar tu vida siempre y cuando las realices con fervor, ya que los pedidos a este santo son conocidos por millones de fieles como yo, que damos fe de sus resultados milagrosos.
Si te interesa reforzar tus deseos en el ámbito del amor, te recomiendo leer estos hechizos de amor fáciles de realizar, y basados en magia blanca.
Quién es San Cipriano?
Es el Santo de los Necromantes, de quienes lo veneran en un punto de intersección entre las artes prohibidas y la religión Católica. En su época fue muy famoso por la preparación de ciertas pócimas, que lo ubicaron en la historia como un hechicero pagano.
La historia cuenta que se ganó el amor de Justina, utilizando este tipo de artes esótericas, se puede decir que fue de los primeros en experimentar con lo que actualmente se conoce como amarres.
Posteriormente, su fe fue ganando terreno a las artes oscuras, haciendo de él una de las personas con mayor fortaleza en su amor a Dios, al punto que en el año 304, fue ordenado a sacrificar por parte del emperador Diocleciano, quien ofrecía como sacrificio a cristianos para venerar a Apolo Nicomedia.
De esta manera Cipriano jamás se negó a renunciar a su fé, reconociendo como único al Dios de los Cristianos, y a Jesucristo nuestro único Señor. A día de hoy es conocido como el «Santo de los brujos«, de quienes emplean en sus artes únicamente magia blanca.
Plegarias a San Cipriano y Santa Justina
Con una oración sublime al santo de los brujos, como así lo llamaban a San Cipriano, puedes lograr ser ayudado/a en cualquier circunstancia que lo necesites.
Junto a su compañera Justina, este santo concreta los más grandes anhelos de quienes acuden a él con desesperación y mucha fe.
Busca tu rezo hoy mismo dentro de estas invocaciones religiosas y consigue darle otro color a tu esperanza y problemas. ¡Verás que tus deseos serán órdenes con este apóstol de los necesitados!. Verás para qué sirve realmente su poder.
1. Para desesperar
¿Quieres que tu pareja se desespere por ti? Sólo lee esta oración que aquí te dejo y lo lograrás! Ora con animosidad y hazlo con fe, porque funciona… ¡el santo hará el resto!
“Tu grandioso poder, oh, grandioso San Cipriano, apóstol de los que sufrimos por amor, que tu poder incomparable haga por mí, lo que tanto ansío hoy.
Haz en nombre de mi devoción por tu nombre, oh! Milagroso Santo mío y de los necesitados, que (di el nombre de quien deseas) se vuelque a mí, en cuerpo y alma y que nadie esté para él/ella más que yo.
Que me necesite y vea por mis ojos y me busque en todas partes aunque sepa que no esté, que se desespere por mí, por estar a mi lado siempre y que se abrace a la esperanza de estar en mi cama, en mi mesa y en mis sueños. Oh, poderoso apóstol, que fuiste brujo en tus milagros y santo en tu santidad, no me abandones ahora!
Necesito de tu Luz, inmaculada luz, milagrosa Luz, que vuelvas loco/a a ese ser que me devora la esperanza de ser suya por siempre y para siempre. Que se acerque hoy mismo para darme su esclavitud en sentimientos fieles y alma dulce y tierna, oh!, Señor que todo lo escuchas, no me dejes en esta instancia con esta angustia de sentirme desamparada/o sin su amor y sin su calor.
Que llegue a mis sueños y a mi realidad con promesas a cumplir y con deseos que le haré realidad. San Cipriano, escúchame, en el fragor de esta oración, va mi súplica! Tráeme a ese ser que amo, ahora mismo tráemelo/a porque desfallezco sin su presencia, por favor, santo milagroso…escucha mi plegaria, junto a tu Justina compañera y mujer íntegra, que junto a ti acompaña tu misión tan sagrada para todos quienes te pedimos …Oh, glorioso, escúchame!… Amén.”
2. Contra los hechizos
Con esta oración tendrás asegurada la protección para cualquier maldad que te hicieran con distintas brujerías negativas para ti.
“Venerado santo de los brujos, yo te invoco para que mis seres queridos y yo mismo/a, tengamos protección de los males del mundo, de hechizos malignos que seres malvados depositan en los que sin maldad vivimos… oh, venerado y altísimo, San Cipriano!
Tú, que embanderaste los milagros dentro de conjuros y sortilegios, te imploro ahora me protejas de tanta envidia y desprecio de otros seres que circundan este terreno, que pares la maldad con tu bendito poder, que me hagas a un lado de tanta injusticia y de tanta hechicería maldita.
Cúbreme con tu manto fidedigno y piadoso y yo estaré a tu lado, honrando tu santidad, oh, prodigio venerado de quienes sufrimos tantos males… tantos infortunios… contra todo, defiende mi persona y de los míos, con tu vara justiciera y con tu aliada protectora, que es Justina, compañera bondadosa de tus días y tus noches…
Oh, milagroso, te respeto y ovaciono en mi oración, quita de mi alma toda la impureza que me hayan puesto, quítame y protégeme por siempre, oh, altísimo, San Cipriano, te venero y te amo, no me dejes sin tu ayuda, haz de mí tu protegida/o, por siempre y para siempre. Amén”
3. Para el trabajo
Conseguir el sustento diario con un digno trabajo es fundamental para vivir con tranquilidad. Aquí te dejo una oración para pedir a San Cipriano por un empleo, y si lo tienes para que sea protegido y valorado.
“ Altísimo y venerado santo de los humildes, del trabajo que necesitamos para poder vivir, te suplico me hagas llegar de tu mano y poder una propuesta digna, para que pueda mantener mi hogar decentemente y te lo agradeceré eternamente, oh, bendito seas!
A tu loada Mujer, compañera de milagros, tu amada Justina, también le imploro por mí, bendíganme y hagan de mis días alegría y regocijo y no penurias. Necesito el sustento para vivir, oh, amado San Cipriano! Necesito me proveas una labor urgentemente, por el pan de mis hijos y por todo.
Ábreme tu corazón e ilumíname con tu poder de Luz, oh, santo mágico, con poderes de brujo y apóstol, bendíceme con tu caridad. Quita esta penumbra que me cierra el alma, dame tu Luz, por favor, eternamente agradecido/a estaré por ti. Así sea!”